Los perros son animales puros y dignos de confianza que nunca lastimarían intencionalmente a su familia, por lo que merecen nuestro respeto y protección.
Este adorable perro blanco ha encontrado en su nuevo hogar un lugar en el que está contento y en paz.
Déjame presentarte a Archie, un bebé de 11 meses, y a Nora, una perra. Forman un dúo muy impresionante. Se conocían desde hacía mucho tiempo y se hicieron amigos cercanos casi al instante; Parecía natural que terminaran juntos.
A diferencia del pequeño Archie, Nora, un pointer inglés de ocho años, “proviene de un hogar abusivo y le aterroriza casi todo”, según revela Elizabeth Spence, la madre de Archie. Nora es el único miembro de la familia que tiene tal historia.
Nora y Archie se enfrentan regularmente. Nora puede experimentar mejor sensaciones de protección, seguridad y comodidad como consecuencia del calor que irradia el bebé.
Tienen una gran conexión entre sí. Archie nunca grita cuando Nora se acerca al recién nacido para abrazarlo, y él parece estar feliz en lugar de perturbado por su presencia.
Solteros todos los días, Archie y Nora tienen la misma rutina: se visten, pasan tiempo juntos disfrutando de actividades en el estudio familiar y duermen juntos por la tarde.
Y Elizabeth ha trabajado mucho para documentar los amorosos abrazos que comparten los dos.
Es posible que aprendamos de Nora que, sin importar de dónde vengas, la familia puede ayudarte a superar casi cualquier cosa. La condición de Nora podría haber sido mucho más difícil si no fuera por la amabilidad de la madre de Archie y el hecho de que Archie le dio la bienvenida a Nora como miembro de su familia.
Qué hermosa foto que muestra el vínculo de amistad que existe entre personas y animales.
Mantengamos los dedos cruzados por la familia de Nora y Archie y esperemos que tengan una vida maravillosa juntos y puedan superar las difíciles condiciones.